No salen de noche ni
tienen afilados colmillos pero aun así muerden. Y cuando lo hacen desgarran. No
son sigilosos porque en realidad hacen mucho ruido ¿O el ruido lo hacemos
nosotros y ellos se arriman para que no sea vea la realidad? ¿Cuál es la
realidad? La realidad es que son unos monstruos. Unos vampiros que no se
alimentan de sangre pero sí de esperanza, una esperanza que no es cosa de hoy
ni cosa de ayer si no que lleva mucho tiempo fraguándose en los deseos y en los
anhelos de muchos de nosotros. Y te golpean, pero la esperanza sigue ahí. Y te
ponen zancadillas, pero la esperanza sigue estando ahí. Pero cuando se acercan
a ti fingiendo tenderte una mano lo que hacen es cogerla para que no escapes y
así poder morderte. Es ahí cuando se llevan tu esperanza.
¿Dónde?
Cuando la encuentre lo diré.
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