21 de julio de 2012

Se ha perdido

¿Lo has encontrado? No ¿verdad? Se ha perdido. Y las cosas que se pierden ya nunca vuelven.
¿Dónde van a parar las cosas que se pierden? Si se supiera, las cosas perdidas ya no lo serían.
¿Y dónde van las personas a las que pierdes? A eso si que te puedo contestar. Se van lejos.
O no tanto, porque hay muchos tipos de pérdidas.
Puedes perder a alguien para siempre y saber con certeza que nunca lo podrás encontrar. Bueno, quizás lo encuentres entre tus recuerdos o en tus sueños pero sabes que no es lo mismo. Ya no.
También puedes perder a alguien por algo que hagas (o no hagas) algo que digas, algo que sientas, algo que dejes de sentir, algo que no entiendas o porque simplemente lo que antes hacía que os encontrarais se ha perdido.
Pero este tipo de pérdida es diferente al anterior porque, aunque también puedas encontrar a quien has perdido entre tus recuerdos o tus sueños, cuando menos te lo esperes, lo volverás a encontrar.
Sin esperarlo, de casualidad.
Y te darás cuenta de que todo lo que había en ti ya no está. Que todo lo sentido se ha perdido.
Que solo quedan los recuerdos que algún día se perderán... cuando tú te pierdas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario