20 de agosto de 2015

Lobo de mar

Hace un tiempo descubrió que era lobo, que aun en manada su espíritu sentía la llamada de la soledad nocturna y que su alma rota buscaba alcanzar la pálida paz de la luna con cada aullido desgarrado.
Guiado por el instinto ese lobo avanzó, creció, aprendió y descubrió el mundo más allá de las colinas caminando entre las nubes y dejando sus huellas sobre el terreno que durante un tiempo fue suyo.
Pero hace poco volvió a sentir esa extraña llamada que le invitaba a descubrir algo nuevo de sí mismo.
Había llegado a un lugar donde el cielo llegaba hasta las orillas, donde un viento valeroso golpeaba agua y rocas a la vez y donde se intuía una paz que solo había sentido mirando al cielo y fue allí donde el azul invadió su espíritu salvaje con serenidad descubriéndole que el mar era algo que nunca más le debía faltar.

14 de mayo de 2015

La extraña calma de tenerte y de estar sin ti

He soñado con fantasmas de carne y hueso. He soñado con su voz y con su tacto, con su cara, con su calor y con una extraña calma. Pero al despertar han vuelto al otro lado, al más allá, a la frontera que se abre cuando se cierran los ojos.
Y quiero que se queden ahí.
Y aunque hay sensaciones pasadas ahora olvidadas que vuelven y parecen ser reales ya no me dejo engañar.
Fui feliz mientras soñaba, pero fui más feliz al despertar.

25 de enero de 2015

Rendezvous

Hace tiempo que no se hablan. Hace tiempo que no se ven. Aun así hay veces que se encuentran y coinciden durante un momento. Entre tres y cuatro minutos para ser exactos, el tiempo que duran las canciones que le recuerdan a ella.